LÓPEZ DEL CAMPO, Roberto.
La obviedad de que los futbolistas son seres humanos antes que jugadores experimenta cierta tendencia al olvido en el día a día de los entrenamientos. Técnicas y métodos cuyo único objetivo suele centrarse en el resultado dejan en un segundo plano el componente humano de los jugadores (Coca, 2006).
El método de entrenamiento psicológico integrado pretende que los jugadores logren su máximo rendimiento a través del conocimiento de sus fortalezas y debilidades susceptibles de mejorar. Una vez conocidas ambas, podrán establecer un plan de acción dirigido por el entrenador que les permita alcanzar los objetivos que se proponga el equipo (Whitmore, 2003).
Los beneficios que este método pretende aportar al equipo pueden llegar a ser innumerables, ya que focaliza su atención en las conductas del sujeto y en los resultados del colectivo (Grant, 2003). Por este motivo, este método es ideal para conseguir aumentar la inteligencia colectiva del equipo.
El método de entrenamiento integrado se centra fundamentalmente en la faceta individual de cada jugador mediante el desarrollo de habilidades interpersonales como el liderazgo, asertividad y trabajo en equipo (Fernández, 2002). Esta última destreza es la que posee una mayor transferencia positiva en el equipo. No obstante, no debemos menospreciar la importancia que la asertividad y liderazgo personal tienen para afrontar situaciones específicas de la competición.
(Extractos del libro: «Entrenamiento Psicológico Integrado de Fútbol»).
Un ejemplo de que el futbolista es antes humano que jugador es la decisión de Xavi Alonso. Un jugador querido por la afición y que aparentemente contaba con la confianza del club y la directiva del Real Madrid. Sin embargo, según su padre Xavi necesitaba un nuevo reto y ha decidido aceptar la oferta del Bayer de Munich. Los motivos reales de abandonar un club con el que acaba de ganar la máxima competición europea solo los conoce él. Aunque es muy probable que se trate más de motivos personales que meramente deportivos.